Las memorias de Tokio Hotel..

..  sobre sus Encuentros con las fans mas alocadas

Los chicos de Alemania aman a sus groupies, pero no en el tourbus.

En el caso de que no fuistes consciente de ello, Tokio Hotel tienen algunos fans muy dedicados, la mayoría de los cuales tienden a ser “jóvenes y mujeres” . Ahora, si se considera que los chicos de TH tienen entre 20 y 22 años de edad y pasan una enorme cantidad de tiempo viajando de ciudad en ciudad (y de habitación de hotel a habitación de hotel), a menudo sólo durante una noche y – bien, puedes ver que queremos decir con esto.

Si quieren, Tokio Hotel podría sacar una ventaja muy grande de esto. Son unos veinteañeros estrellas del rock, después de todo.

“Hubo algunas chicas, creo que fue en España, que estaban en el hotel antes de que [el baterista] Gustav llegara a el”; dice el cantante de Tokio Hotel Bill Kaulitz. “Entró en la habitación, y vió que estaban tumbadas en la cama, completamente desnudas.”

“Pregúntale a Gustav [lo que pasó después],” añade Tom el hermano de Bill. “Pienso que él tuvo una oportunidad.”

“Tuvimos un encuentro sucio”, dijo Schafer con una cabezada. “Muy sucio”.

Aunque estas historias son sólo capítulos del creciente libro de cuentos increíbles de Tokio Hotel, ellos no cambian exactamente con cinco estrellas. No son semidioses que acumulan a groupies, que destruyen hoteles o fiesteros del hard-rock. En el fondo, son todavía como niños, y toda esta adulación es todavía muy aplastante, tanto es así que a veces tienen que alejarse de todo esto un poco, en el santuario de su tourbus.

“Hemos hecho una norma como grupo: No nos permitimos llevarnos a una chica en el tourbus”, dijo Tom- “Odio a esa regla.”

“El tourbus es nuestro único lugar privado, es nuestro lugar para relajarnos”, explicó el bajista Georg Listing, el único miembro del grupo con una novia ahora mismo. “Y es muy molesto si hay alguien ahi gritando todo el rato.”

Y, oh, que está gritando. Esto nuncase termina, no importa donde vaya Tokio Hotel, no importa la hora del día (o de la noche). Desde el tourbus a los escenarios, de las afterpartys a las habitaciónes del hotel, están constantemente inundados por los chillidos de sus fans femeninas. Es un recordatorio estridente de su fama. Pero, sorprendentemente, a los chicos de Tokio Hotel no parece importarles. Ellos aman a sus fans, sus excentricidades, su dedicación al grupo. Y han llegado al punto en que son capaces de clasificarlas – las fans de Tom, por lo menos.

“Pienso que las admiradoras de Tom son más sexuales,” se rió Bill.

“Yah, esto muy cierto,” añadió Tom. “Ellas saben lo que quieren.”